Familias capitalinas cantan con devoción a la Inmaculada Concepción

Tatiana Rodríguez Vargas

Con sus guitarras, maracas, chichiles y panderetas, así las familias capitalinas se dispusieron a cantar de altar en altar a la Madre de Dios, en la advocación de la Inmaculada Concepción.

Esta fiesta religiosa y popular en honor a la Patrona de Nicaragua, se vivió en total tranquilidad gracias a las diferentes acciones que realizó la Policía Nacional para resguardar la seguridad de cada feligrés que salió de su casa para ir a cantar y recibir su respectiva gorra.

“Vivo en Costa Rica pero me gusta venir a Nicaragua en esta fecha tan linda, tan hermosa que es venir a cantarle a la Virgen y es algo que lo traemos desde aquí, desde adentro en el corazón”, mencionó la joven Aracely Araica.

Por su parte doña María Teresa Acevedo, es una promesante que lleva décadas celebrando a la Madre de Dios y menciona que “26 años hemos rescatado esta tradición y antes la tenía mi bisabuela y ahora nosotros la rescatamos hace 26 años”.

Sostiene que esta fiesta mariana se “puede celebrar con alegría, se puede celebrar con la seguridad gracias al Buen Gobierno, al Comandante Daniel y la Compañera Rosario”.

En el sector de Villa Don Bosco, la familia de Alfredo Carballo cumplió 50 años de cantar a la Virgen María, “mi familia todos somos del occidente, de León, por eso la imagen que ustedes ven es una réplica de la Patrona nacional” e indica que es una tradición que “la venimos llevando con amor, siempre con esta característica que tenemos los nicaragüenses de hacerlo alegres a como se lo merece ella”.

Estos peregrinos, que venían de todos los puntos de la capital, entonaban los canticos tradicionales en esta fiesta religiosa y popular.