Primer Comisionado Francisco Díaz inaugura nuevas instalaciones policiales

“Con estas instalaciones tendremos mejores capacidades de esclarecimiento de los hechos, especialmente de aquellos crímenes violentos y otros delitos relevantes que atentan contra la vida, la integridad física y los bienes de las personas, mejorando el aporte de evidencias al Sistema de Justicia Penal”, explicó el Primer Comisionado Francisco Díaz Madriz, Director General de la Policía Nacional, al momento de inaugurar el Complejo Policial “Evaristo Vásquez Sánchez”, que alberga las oficinas de la Dirección de Auxilio Judicial Nacional (DAJ) y la Dirección de Archivo Nacional (DAN).

El Jefe Policial detalló que las nuevas instalaciones tienen tres mil 500 metros cuadrados de construcción, “con una inversión de 183 millones de córdobas financiada por el Presupuesto de la República y el decidido apoyo de nuestro Presidente de la República y Jefe Supremo de la Policía Nacional, Comandante Daniel Ortega Saavedra”.

“Nuestra Policía Nacional continúa ampliando su cobertura territorial y mejorando su infraestructura para prestar un mejor servicio a nuestras comunidades, cumpliendo con su misión constitucional y sus principios institucionales de respeto a los derechos humanos y trato digno a las personas, velando por su vida e integridad física y psíquica, especialmente cuando se encuentran detenidos, observando y cumpliendo en todo momento con los trámites, plazos y requisitos establecidos por la Constitución Política y las leyes”, destacó el Primer Comisionado Díaz, poco antes de entregar las llaves al Comisionado General Luis Adolfo Pérez Olivas, Jefe de la DAJ.

Primer Jefe de Investigación

El Primer Comisionado señaló que la DAJ “es la especialidad encargada de la investigación de los delitos, de las faltas penales, aprehensión de los delincuentes y su remisión a las autoridades competentes”, y que este Complejo lleva el nombre del Subcomandante Evaristo Vásquez Sánchez, conocido como “El Chino”, revolucionario internacionalista de origen panameño, quien fue el primer Jefe de Investigación de la Policía Sandinista hoy Policía Nacional, y cayó en combate en 1985 durante una emboscada en la zona del Triángulo Minero.

“En nombre de las y los policías de nuestra Institución, agradecemos el apoyo de nuestro Presidente de la República y Jefe Supremo de la Policía Nacional, Comandante Daniel Ortega Saavedra, reafirmamos nuestro compromiso de continuar trabajando por la paz, la seguridad, y la protección de la vida y los bienes de las personas, familias y comunidades”, enfatizó el Director General.

Al acto de inauguración asistieron miembros de la Jefatura Nacional de la Policía, diputados de la Asamblea Nacional, autoridades del Ministerio de Gobernación, del Ministerio Público y de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos, quienes realizaron el Corte de Cinta, además estuvieron presentes miembros del Consejo Nacional de la Policía y personal que labora en la DAJ y la DAN.

No hay un derecho humano que se haya quedado fuera

El nuevo y extenso Complejo Policial está situado en una pequeña colina en la parte sur del Memorial Sandino, donde el viento sopla fuerte, sus instalaciones lucen impecables, atractivas, con diversas calles y varios edificios que albergan las oficinas de los oficiales que laboran ahí, y las celdas, las que gozan de todas las condiciones necesarias para garantizar los derechos humanos de las personas imputadas.

“No hay un derecho humano que se haya quedado fuera”, asegura el diputado Carlos Emilio López, después de realizar un recorrido por las instalaciones.

“Cada milímetro, cada centímetro de estas instalaciones fueron diseñadas, planificadas, organizadas, construidas en base al paradigma, en base a los criterios de los derechos humanos”, enfatiza.

“Pudimos constatar que la infraestructura, el espacio, las celdas, tienen luz, tienen ventilación, tienen espacio suficiente, camas confortables, así que se respeta el derecho a la intimidad, a la privacidad, el derecho a la honra, el derecho a la comunicación de la persona privada de libertad con su familiar, el derecho a la comunicación de la persona privada de libertad con su asistencia jurídica, a su abogado, además se protegen los derechos humanos de los testigos, de las víctimas, es decir, esta infraestructura garantiza derechos humanos de las personas, de las familias, y de la comunidad”, sostiene este promotor y defensor de los derechos humanos.

Carlos Emilio no escatima en reconocer que “es un paso gigante que no tiene parangón en la historia de Nicaragua, para proteger, para restituir los derechos humanos de las personas procesadas. Es un acto de restitución, porque nunca antes en Nicaragua habíamos tenido una instalación de esta magnitud, con estas condiciones, con esta confortabilidad, con esta tecnología, con esta humanidad, con esta dignificación, y yo diría que pocos países en la región centroamericana tienen instalaciones parecidas a éstas”.

“La Policía merece un reconocimiento, una Policía respetuosa, una Policía que se ajusta a las garantías constitucionales y a las garantías procesales, y de los derechos humanos”, concluye el diputado López, porque “las personas que han sido señaladas de infringir la ley, (aquí) serán tratadas con humanidad, con dignidad, con respeto, con absoluta observancia de los derechos humanos”.

Cabe destacar que dentro de las instalaciones hay celdas para mujeres con su baño correspondiente, celdas para varones con ventilación, celdas especiales para personas que tengan problemas de salud, salas de reconocimiento con protección para los testigos, armario para el resguardo de las pertenencias de los procesados, áreas de sol, salas de visita, cubículos de comunicación con abogados, centro médico, entre otros espacios que contribuyen a garantizar los derechos humanos de las personas procesadas.