Valeria Díaz Álvarez

A pesar de la lluvia miles de promesantes acompañaron la imagen de Santo Domingo de Abajo, quien sale de su morada todos los siete de agosto, en San Andrés de la Palanca, y recorre los barrios costeros de la capital para luego quedarse por diez días en la Iglesia Cristo agonizante del Rosario.

La Vicealcaldesa Scarleth Solís López, mayordoma de estas fiestas expresó la alegría de ser parte de estas actividades. “Ya son cinco años, ya estamos en estas fiestas, que lo que hace es promover la religiosidad del pueblo nicaragüense, especialmente la gente de Ciudad Sandino, Mateare, y los barrios de aquí de occidente y estamos felices”.

Por más de 25 años doña Blanca Huerta, paga promesas a Minguito por favores recibidos, “nosotros como gabinetes del municipio de Ciudad Sandino, participamos y al mismo tiempo pago mi promesa por mi hijo y mi papá”. Explicó que trabaja siempre para conservar la fe en las familias nicaragüenses.

 Minguito llegó con seguridad a su morada

Los hombres y mujeres de azul celeste garantizaron que el recorrido de Minguito transcurriera con tranquilidad, acompañando a los feligreses para que no se presentara ninguna eventualidad.

“Como tradición y misión fundamental  que tiene nuestra institución, y cumpliendo con el deber sagrado de nuestra Jefatura Suprema, tenemos la gran responsabilidad; uno de la seguridad, dos de llevar y traer al santo con todo la seguridad y fervor que tiene nuestro pueblo”,  explicó el Comisionado Mayor Donald López, Jefe del Distrito Diez de Managua.

Asimismo el Jefe Policial puntualizó que “andamos por los 700 compañeros, que desde las cinco y media de la mañana, nos hemos activado y dispuesto para garantizar lo que estamos en una parte culminando, ya que esta parte le pasa al Distrito Dos”.

De igual manera Eduardo Barahona, mejor conocido como Chema Junior, reconoció el acompañamiento de la Institución Policial en la fe de los managuas. “La Policía siempre hace un trabajo muy especial en estas actividades, sin la Policía esto fuera un relajo, gracias a Dios, tenemos a la Policía Nacional que nos apoya, en todo evento y más en este evento que es muy masivo”, comentó Chema Junior.

Jessica Smith, vestida de folklor y en compañía de sus dos nietos comentó ser originaria de la Costa Caribe y tener más de 20 años bailándole a Santo Domingo de Abajo por favores recibidos. “Tengo artritis en las rodillas, siempre viven enfermos mis nietos, ando con ellos para que ellos, sientan que Santo Domingo también hace milagros con ellos, primero Dios después Santo Domingo”

A las 5:46 de la tarde, después de diez horas de recorrido, al ritmo de filarmónicos, pólvora y aplausos Santo Domingo de Abajo entró triunfante a la iglesia Cristo agonizante del Rosario, quien iba cargado a hombros y custodiado por la Policía Nacional.